Lección Aprendida
El Plan Estratégico de Turismo para Roma 2019-2025 sirve de modelo ejemplar de estrategias y buenas prácticas de turismo sostenible. Con su enfoque global, el plan demuestra el compromiso de gestionar el turismo de forma que se equilibren las necesidades de los visitantes con la conservación y mejora del patrimonio cultural y natural de Roma.
Uno de los puntos fuertes del plan es su proceso participativo, conocido como FUTOUROMA, en el que intervinieron 150 representantes del sector turístico de Roma. Este enfoque integrador garantizó que se tuvieran en cuenta diversas perspectivas y conocimientos, fomentando el sentido de pertenencia y la colaboración entre las partes interesadas. Los objetivos generales del plan de reforzar la posición de Roma entre los principales destinos europeos y mundiales y transformar su imagen de ciudad histórica en destino dinámico y orientado al futuro son encomiables. Al fijar objetivos claros, el plan proporciona una hoja de ruta para lograr un crecimiento turístico sostenible preservando al mismo tiempo el carácter único de la ciudad. El plan aborda diversos aspectos cruciales del turismo sostenible, como el atractivo, la accesibilidad, la competitividad, la innovación, la sostenibilidad, la hospitalidad, la inteligencia de datos, la concienciación, la gobernanza y la formación. Al abordar estas áreas de forma integral, el plan reconoce la interconexión de los distintos factores que influyen en el desarrollo del turismo sostenible.
El Plan Estratégico de Turismo para Italia (2023-2027) se centra en cinco pilares: gobernanza, innovación, calidad e inclusión, formación, y sostenibilidad. Hace hincapié en la colaboración entre el Estado y las regiones. El plan promueve la innovación, la calidad de las experiencias de los visitantes, la inclusión, la formación y la sostenibilidad. Su objetivo es equilibrar el crecimiento económico con la protección del medio ambiente y la responsabilidad social. Además, varias regiones y ciudades de Italia están aplicando prácticas sostenibles. Dan prioridad a la gestión sostenible de los destinos, la conservación del patrimonio cultural y el fomento de la movilidad sostenible. Por otra parte, Italia se ha mostrado proactiva en la aplicación de medidas para hacer frente al turismo excesivo en destinos populares. Para combatirlo, varias ciudades y regiones italianas han introducido medidas como sistemas de gestión de visitantes, límites de capacidad y promoción de destinos alternativos. Por ejemplo, Venecia ha implantado un sistema de control del número de visitantes mediante el Venice City Pass y la Venice Card, que animan a los visitantes a explorar zonas menos conocidas. Del mismo modo, Florencia ha adoptado estrategias para dispersar a los turistas promoviendo atracciones alternativas y fomentando las visitas fuera de las horas punta.
Otra iniciativa es ‘Destinos Turístico Italianos 2025‘ lanzada por el ENIT (Ente Nacional Italiano de Turismo) , cuyo objetivo es desarrollar planes estratégicos para los principales destinos turísticos de Italia. La iniciativa "Destino Turístico Italiano 2025" reconoce la necesidad de acciones específicas adaptadas a cada destino, teniendo en cuenta sus características y retos únicos. Los planes estratégicos elaborados en el marco de esta iniciativa abarcan diversos ámbitos, como la sostenibilidad económica, medioambiental y social. Para promover la sostenibilidad económica, los planes dan prioridad a iniciativas que apoyen a las empresas locales, fomenten el espíritu empresarial y estimulen la creación de empleo en el sector turístico. Esto incluye fomentar la colaboración entre los agentes turísticos, promover la innovación y la digitalización, y diversificar la oferta de productos turísticos para atraer a una gama más amplia de visitantes durante todo el año.
La ausencia o ineficacia de estrategias turísticas integrales tiene consecuencias perjudiciales para el desarrollo sostenible del sector turístico en Italia. Sin estrategias bien definidas y coordinadas, existe el riesgo de que se produzca un crecimiento incontrolado del turismo, un turismo excesivo en destinos populares y repercusiones medioambientales y sociales negativas. Además, la ausencia de estrategias impide aprovechar los beneficios económicos potenciales, optimizar la asignación de recursos y mejorar la competitividad de los destinos italianos. Abordar estos problemas requiere esfuerzos concertados a todos los niveles. Es esencial asignar los recursos adecuados y prestar apoyo, sobre todo a las PYMEs, en la realización de investigaciones, análisis y formulación de estrategias. La racionalización de los procedimientos burocráticos y la simplificación de la normativa pueden facilitar la aplicación eficaz de las estrategias. Además, mejorar la coordinación y la comunicación entre las autoridades europeas, nacionales, regionales y locales es crucial para garantizar la alineación de objetivos y políticas.